Artearéjula: (8.1) SALÓN DE VERSALLES.

Tema 8.1 -BARROCO-.

LA GALERÍA DE LOS ESPEJOS.

PALACIO DE VERSALLES.

Laura Nieto González.

CONTEXTO HISTÓRICO.

Corresponde con el periodo absolutista en Francia. Luis XIV fue rey de Francia entre 1643 y 1715. En su mandato redujo la nobleza, quitó poder al parlamento y el clero, centralizó la Administración, simbolizó el orden y la estructura social. Implantó un poder monárquico absoluto en Francia, y así dominó bajo su poder a muy diversas facciones, con el Rey del Sol comenzó el absolutismo pleno.

La Galería de los Espejos (Galerie des Glaces) se encuentra en el interior del Palacio de Versalles, rodeada por el Salón de la Guerra y el Salón de la Paz.

Su objetivo era impresionar a los visitantes que llegaban al sinuoso palacio de Luis VXI.

La Galería de los Espejos sería el lugar de reuniones, encuentros frecuentada por los miembros de la Corte Francesa e ilustres visitantes. Grandes bailes se celebraban entre sus paredes.

Además de el lugar idóneo para firmar acuerdos y tratados importantes como El Tratado de Versalles (28 de junio de 1919) que puso fin a la Primera Guerra Mundial.

Para que el rey tuviera una posición superior se instalaba el trono real en un estrado en el extremo de la Galería.

Realizada por el arquitecto francés Jules Hardouin Mansart entre 1678 y 1684.

Es de estilo barroco con una longitud de 73 metros por 10'5 metros de ancho.

En su interior lo que de verdad destaca es el Salón de los Espejos constituido por 17 ventanas que se encuentran cara a cara con 357 espejos, los cuales reflejaban la luz del Sol cuando entraba por las ventanas y esto podemos relacionarlo con un símbolo del “Rey Sol” = Luis XVI, además de aparentar más anchura a la estancia.

La sala decorada con los mejores mármoles rojos, oro, mármoles blancos, espejos que en esos tiempos resultaban muy caros. Además de mármoles, son importantes los estucos y el cristal, material más barato, pero igualmente efectivo visualmente.

Además la galería constituyó un verdadero acontecimiento en pleno siglo XVII, por la abundancia y el tamaño de sus espejos. Fue el modelo para reafirmar la capacidad de Francia para fabricar espejos. Sobretodo reflejaba la riqueza y el poder de Francia.

Es también el nacimiento de una forma de supremacía artística en el estilo francés.

El techo está decorado con una gran bóveda de cañón realizada entre 1681 y 1684, decorada por casi 1000 metros cuadrados de pinturas realizadas por el pintor francés Charles Le Brun, miembro de la Real Academia de Pintura y Escultura, que quedó inacabada a su muerte. Tuvo bajo sus órdenes a decenas de artistas y artesanos. Se reservó las Salas de la Guerra y de la Paz, la Escalera de los Embajadores, y este gran salón.

De las pinturas del techo del salón más de dos docenas se refieren a los éxitos militares de los primeros veinte años del reinado de Luis XIV y son un tributo al poder y la gloria del rey, en concreto desde su mayoría de edad hasta la Paz de Nimega.

Estas pinturas fueron realizadas por la técnica “marouflage”, que se compone de telas pegadas sobre la bóveda tras haberlas acabado. El resto fueron pintadas directamente sobre la bóveda.

Las esculturas de la sala

Los capiteles de las pilastras fueron adornados por una flor de lis y con el gallo galo. Los trofeos dorados fueron realizados por el orfebre Pierre Ladoyreau.